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El descarrilamiento de un vagón del Tren Maya, ocurrido la tarde de este martes en las inmediaciones de la estación Izamal, generó escenas de pánico entre los pasajeros.
Aunque no hubo heridos de gravedad, varios usuarios —principalmente adultos mayores— sufrieron crisis nerviosa y requirieron atención de paramédicos en el lugar. El transporte ferroviario fue suspendido de manera temporal mientras se realizan las investigaciones correspondientes.
Este hecho revive la preocupación ciudadana, ya que hace poco más de un año ocurrió un accidente similar en la misma ruta, a la altura de Tixkokob. Hasta el momento, autoridades federales y estatales no han emitido un comunicado oficial sobre lo sucedido.
